martes, 2 de marzo de 2010

VENEZUELA. Azotes degollaron y acribillaron a tiros a un vigilante en La Vega


Reportaron 36 homicidios en Caracas durante el pasado fin de semana

La señora Mercedes Ortega lloró el asesinado de su hijo en la parte alta de Lídice (Fernando Sánchez)

Un supervisor de una empresa de vigilancia privada fue asesinado de manera atroz por parte de delincuentes la madrugada del domingo en el sector La Invasión, del barrio La Vega.

Cristian Herrera, de 18 años de edad, fue ultimado por azotes del barrio, quienes lo degollaron, le propinaron tres disparos y posteriormente lo lanzaron por un barranco. La víctima, quien residía en el barrio El Carpintero de Petare, se encontraba en la peligrosa zona con unos amigos quienes le habían invitado a tomarse unas copas.

"La policía nos dijo que lo zumbaron por un despeñadero y para sacarlo tuvieron que enfrentarse a tiros con los delincuentes", dijo la concubina del infortunado hombre, Maura Veloz. Los antisociales le produjeron heridas graves a dos personas que acompañaban a Herrera. Uno de los lesionados permanece en terapia intensiva del hospital de El Llanito. El hombre recibió un disparo en la garganta.

Cristian Herrera era natural del estado Zulia. Sus familiares realizan trámites para trasladar el cuerpo a su tierra natal. "Esos delincuentes ya no se conforman con matar a la gente, además tienen que hacerle maldad", dijo la señora Veloz cuando reclamaba el cuerpo en la medicatura forense de Bello Monte. La víctima dejó a dos hijas huérfanas.

Reportan 36 homicidios

A la morgue de Bello Monte ingresaron durante el operativo policial que comenzó a las seis de la tarde del viernes y culminó hoy a las seis de la mañana 36 personas que fueron víctimas de homicidios en la capital. Entre los agraviados figuran dos taxistas. La mayoría fue ultimada con armas de fuego al resistirse al robo.

En Lídice fue asesinado Carlos Javier Ortega, de 19 años, de edad. El crimen ocurrió en el sector Canaima a las 12:30 del sábado cuando el agraviado llegaba a su casa luego de haber asistido a una reunión con unos amigos.

Recibió un disparo en la cabeza, aun cuando se lanzó por un barranco para salvarse junto a un adolescente de 16 años. Este último recibió un disparo en el hombro derecho. La víctima, que deja dos niñas huérfanas, laboraba en un autolavado del Centro Comercial Tolón.

"Cuando llegan los policías los malandros ya están avisados. Eso ahí es una cueva de hampones. Anoche hubo otro tiroteo que parecía no tener fin", dijo Mercedes Ortega, madre del joven asesinado en Lídice. Trascendió que durante el mes de febrero ingresaron a la medicatura forense de Bello Monte 413 cadáveres de personas que fallecieron de manera violenta.

Familiares del trabajador asesinado acusaron a integrantes de la banda de "los Hijos de Calvo", a quienes le atribuyen una cadena de asesinatos en el sector El Manicomio. "Les pedimos a las autoridades que pongan más policías, más seguridad y un módulo. Ahí nadie puede dormir en paz y en la mañana debe encomendarse a Dios cuando sale para el trabajo. Ahora una niña de dos años y otra de un mes de nacida quedan huérfanas", señaló la señora Ortega mientras lloraba la muerte de su hijo. Recordó que el pasado mes de diciembre otros dos vecinos fueron asesinados en similares circunstancias. Los familiares del agraviado son oriundos de Cartagena, Colombia.


Gustavo Rodríguez
EL UNIVERSAL

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