El Cicpc presume que el móvil del crimen fue la venganza por drogas
Los detectives de la División contra Homicidios identificaron a tres de las personas que la madrugada del martes ingresaron a una vivienda situada en el barrio Mario Briceño Iragorry y decapitaron a un joven de 18 años.
Los investigadores establecieron que la víctima, identificada como Rubén Rivas Colina, no presentaba antecedentes ni registros policiales. Tampoco estaba siendo solicitado por delito alguno. Sin embargo, las pesquisas de campo determinaron que los responsables forman parte de una banda formada por unos quince menores de edad que habitan en el sector Las Barras, situado entre el bloque 12 de Propatria y el barrio Mario Briceño Iragorry. Las diligencias policiales se encaminan a determinar el móvil del descuartizamiento. No obstante, sospechan que se trata de una venganza por razones de drogas. Los antisociales penetraron en la vivienda donde le propinaron tres disparos al joven Colina, luego con un machete procedieron a decapitarlo. Huyeron con la cabeza y trescientos metros más adelante procedieron a clavarla sobre una cabilla. Vecinos del barrio realizaron el macabro hallazgo que luego fue notificado a los detectives del Cicpc. Cuatro miembros de la familia lograron sobrevivir, aunque una menor de trece años recibió un disparo rasante en una de sus extremidades. GR
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