IRAK.Al menos cuatro turistas surcoreanos mueren por una explosión

La Policía atribuye el atentado a la red terrorista Al Qaeda.

El atentado tuvo lugar en la localidad turística de Shibam.

Yemen es todavía uno de los bastiones de Al Qaeda en la región.
EFE.

Al menos cuatro turistas surcoreanos murieron este domingo al producirse una explosión al paso de un vehículo con extranjeros en la localidad turística de Shibam, en el sureste de Yemen, según dijeron fuentes de la Policía yemení. Las primeras investigaciones de la Policía, que atribuyen el atentado a la red terrorista Al Qaeda, el artefacto explosivo fue accionado por control remoto. Poco después se puso en marcha un dispositivo para buscar a los autores.

La mayoría de las veces se registran estos hechos para presionar al Gobierno Conocida como ´el Manhattan del desierto´ por sus edificaciones de barro, similares a rascacielos, la ciudad amurallada de Shibam, en la provincia de Hadramut, a unos 900 kilómetros de Saná, es Patrimonio Mundial de la UNESCO y uno de los centros turísticos del país árabe. Yemen es todavía uno de los bastiones de Al Qaeda en la región, a pesar de las campañas de seguridad emprendidas por las autoridades contra esta organización terrorista.

De hecho, uno de los ataques más mortíferos fue perpetrado por un comando supuestamente vinculado a Al Qaeda el pasado 17 de septiembre cerca de la embajada de Estados Unidos en Saná, una acción que se cobró la vida de dieciséis personas.
Secuestros a extranjeros
Con anterioridad, el 2 de julio de 2007, ocho turistas españoles fallecieron cuando un coche-bomba chocó contra su vehículo cuando visitaban un sitio arqueológico del este de Yemen. El de este domingo es el primer caso que involucra a turistas surcoreanos desde el secuestro que sufrieron tres de ellos en 1998. En esa ocasión, los rehenes, entre ellos la esposa del cónsul en Saná y su hija, estuvieron retenidos por una tribu del sureste del país.
El secuestro de extranjeros, especialmente de turistas y de trabajadores de la industria del petróleo, se ha convertido en un hecho frecuente en Yemen.
La mayoría de las veces se registran estos hechos para presionar al Gobierno del presidente yemení, Ali Abdalá Saleh, con el fin de que acepte peticiones planteadas por líderes tribales, y los secuestros no suelen prolongarse por mucho tiempo.