La droga de gran pureza estaba repartida en varios fardos e iba a ser distribuida en toda España. guardia civil
La Guardia Civil se ha incautado de 31 kilos de heroína de gran pureza, uno de los mayores alijos de esta droga intervenidos en España en los últimos años, en una operación desarrollada en Valencia con el apoyo de la Agencia Antidrogas Norteamericana (DEA) y que culminó en el aparcamiento de un centro comercial de Paterna con la detención de cinco personas. La heroína incautada en la denominada operación "MATT", que ha sido dirigida por el Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, iba a ser distribuida en España y estaba oculta en los dobles fondos de un vehículo de alta gama.
La droga había sido trasladada a nuestro país por ciudadanos búlgaros, y su destinatario era un turco asentado en España y vinculado con una de las mas importantes familias de Turquía dedicadas a la distribución de heroína en el mundo. Este ciudadano turco, considerado el jefe del grupo, ha sido uno de los detenidos en la operación, en la que también han sido arrestados tres búlgaros, que se encargaron del traslado de la droga, y un español, que colaboraba con la organización en labores de guía y de seguridad.
Las investigaciones se iniciaron cuando los agentes tuvieron conocimiento de que el ciudadano turco, asentado en Valencia, tenía la intención de recibir una importante partida de esta droga.
Tras establecer un dispositivo de vigilancia sobre dicha persona, los agentes descubrieron que en el aparcamiento de un centro comercial de Paterna se iba a realizar el pasado domingo la transacción de la mercancía. Una vez controladas todas las personas que participarían en el intercambio de la droga, y debido a las fuertes medidas de seguridad que adoptaban para eludir a las fuerzas de seguridad, los investigadores optaron por intervenir la heroína ante el riesgo de que los sospechosos se deshicieran de la sustancia estupefaciente si detectaban la presencia policial.
La Guardia Civil localizó los 31 kilos de heroína, oculta en dobles fondos practicados en las puertas y en el asiento posterior de un vehículo de alta gama con matrícula búlgara. Posteriormente, se procedió a la detención de los tres ciudadanos búlgaros que habían introducido la droga y del español que se encargaba de recibir la mercancía y de hacer su posterior entrega al turco.
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