Un grupo comando perpetró un audaz robo en esa ciudad cordobesa. La Policía logró detener a dos delincuentes, en tanto que otros cuatro se fugaron. Golpearon y mantuvieron de rehenes a empleados de la empresa Transporte de la Villa.
Los delincuentes amenazaron con matar a un bebé de ocho meses (Informe de Abelardo Fonseca).
Un grupo comando integrado por al menos seis delincuentes fuertemente armados irrumpió en horas de la madrugada en la empresa Transporte de la Villa, ubicada en la calle Atenas 60 de Carlos Paz, y luego de reducir a todo el personal que se encontraba en ese momento en el lugar –en su mayoría mecánicos- robó entre 25 mil y 20 mil pesos.
El llamado de uno de los damnificados en momentos en que se desarrollaba el ilícito alertó a la Policía, que de inmediato montó un fuerte operativo en el sector.
Ante la presencia de los uniformados los malvivientes tomaron de rehenes a los trabajadores de la firma de transporte y tras un nutrido intercambio de disparos cayeron detenidos dos de los sujetos, mientras que los restantes lograron ganar la fuga.
Dando muestras de una terrible saña, los ladrones amenazaron a los trabajadores de la compañía con matar a un bebé de ocho meses, hijo de un empleado administrativo a quien había ido a visitar su esposa. Los cacos no dudaron de tomar de los brazos al pequeños y gatillarle en la cabeza para amedrentar a sus padres.
El comisario Miguel Colino, jefe de la departamental Punilla, en diálogo con Cadena 3 dio detalles del dispositivo montado.
"Los delincuentes ingresaron al amplio predio por el frente y por detrás. Sorprendieron y redujeron a los cicno mecánicos, a quienes golpean y encierran en un cuarto", relató.
"Un empleado administrativo -padre de la criatura que estaba en poder de los delincuentes- cuando irrumpe la Policía golpea a un ladrón, que huy dejando abandonada el arma", añadió Colino.
“Cuando llegaron los móviles se produce un intercambio de disparos y se detiene a dos de los sujetos. Se les secuestró un pistolón y un revólver calibre 38”, señaló el funcionario policial.
Y agregó: “En total eran nueve empleados, seis delincuentes, de los cuales dos fueron detenidos y cuatro fugaron. Lograron llevarse entre 25 mil y 35 mil pesos. Se incautaron armas de fuego, teléfonos celulares y una notebook”.
Cabe señalar que un policía resultó herido y otro se salvó de un navajazo gracias a que portaba el chaleco antibalas.
Informe de Abelardo Fonseca.
El llamado de uno de los damnificados en momentos en que se desarrollaba el ilícito alertó a la Policía, que de inmediato montó un fuerte operativo en el sector.
Ante la presencia de los uniformados los malvivientes tomaron de rehenes a los trabajadores de la firma de transporte y tras un nutrido intercambio de disparos cayeron detenidos dos de los sujetos, mientras que los restantes lograron ganar la fuga.
Dando muestras de una terrible saña, los ladrones amenazaron a los trabajadores de la compañía con matar a un bebé de ocho meses, hijo de un empleado administrativo a quien había ido a visitar su esposa. Los cacos no dudaron de tomar de los brazos al pequeños y gatillarle en la cabeza para amedrentar a sus padres.
El comisario Miguel Colino, jefe de la departamental Punilla, en diálogo con Cadena 3 dio detalles del dispositivo montado.
"Los delincuentes ingresaron al amplio predio por el frente y por detrás. Sorprendieron y redujeron a los cicno mecánicos, a quienes golpean y encierran en un cuarto", relató.
"Un empleado administrativo -padre de la criatura que estaba en poder de los delincuentes- cuando irrumpe la Policía golpea a un ladrón, que huy dejando abandonada el arma", añadió Colino.
“Cuando llegaron los móviles se produce un intercambio de disparos y se detiene a dos de los sujetos. Se les secuestró un pistolón y un revólver calibre 38”, señaló el funcionario policial.
Y agregó: “En total eran nueve empleados, seis delincuentes, de los cuales dos fueron detenidos y cuatro fugaron. Lograron llevarse entre 25 mil y 35 mil pesos. Se incautaron armas de fuego, teléfonos celulares y una notebook”.
Cabe señalar que un policía resultó herido y otro se salvó de un navajazo gracias a que portaba el chaleco antibalas.
Informe de Abelardo Fonseca.
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