47 caraqueños perdieron la vida violentamente en el fin de semana
Los familiares del activista de la junta comunal Tony Blanco León han acudido en tres oportunidades en los últimos seis meses a la medicatura forense de Bello Monte, para reclamar el cadáver de algún pariente al que la delincuencia le ha quitado la vida.
La madrugada del pasado domingo criminales del barrio El Rosario de Minas de Baruta interceptaron a León cuando salía de una fiesta acompañado de un amigo y se dirigía a su vivienda, ubicada en el sector El Pozo. "Al amigo le dijeron vete y corre, pero a mi primo le señalaron, contigo vamos a estrenar esta pistola, de esas que llaman full equipo", dijo la señora Arelis León. Se refería a una arma automática con cargador doble, mira láser y además con selector de tiro como accesorios extraordinarios.
"Ya hemos visto varias veces a los periodistas aquí en la morgue porque en los últimos seis meses la delincuencia nos ha quitado a tres familiares. Hace tres meses asesinaron a mi otro primo, Wilmer León, porque quedó en la línea de fuego, así como a mi hermano Dangendry Donaire León, en Las Mercedes. Al pobre le cayeron a golpes unos patoteros", dijo.
Donaire salía de una discoteca e intentaba utilizar un cajero automático para regresar a su vivienda en Baruta. Murió por traumatismos.
La señora Arelis León recordó que en septiembre del año 2007 la delincuencia también tocó la puerta de su familia, pues los integrantes de la banda de "el Keiver" asesinaron a Emerson León, de 34 años. Era mototaxista. Lo ultimaron al resistirse a que lo despojaran de su motocicleta.
"A veces estamos aquí afuera y en ocasiones ahí adentro, en las planchas de la morgue por tanta inseguridad. Las Minas de Baruta están desbordadas de tanta delincuencia, pero lo triste es que se trata de puros muchachos que echan tiros todas las noches y madrugadas hasta que se cansan", comentó.
"Si los miran se sienten ofendidos y te agraden; pero si no los ven se molestan también. Ahí la vida de la gente depende del genio de cada malandro. Así tenemos que sobrevivir a diario en ese barrio", dijo.
Ultimaron a un pintor
La familia León tuvo que esperar en la cola, pues los patólogos de la medicatura forense tuvieron que practicar autopsias a 47 caraqueños que fueron asesinados el fin de semana. "Ya estamos acostumbrados a todos estos procesos burocráticos. Nos armamos de paciencia y valor para poder resistir", refirió la señora León.
También a esa misma hora fue asesinado el pintor automotriz Víctor Alfonso Díaz Pérez, de 20 años, cuando intentaba llegar a su vivienda, situada en la calle Coromoto con callejón Vista Hermosa.
Detectives de la policía científica solicitaron refuerzos para levantar el cadáver, pues los delincuentes los atacaban desde distintos lugares. El joven Díaz Pérez dejó huérfano a un bebé de cinco meses de nacido.
Gustavo Rodríguez
EL UNIVERSAL
No hay comentarios:
Publicar un comentario