El turismo en el que se introdujo el agente circuló 100 metros sin control
La calle Mayor de Paterna fue ayer escenario de un espectacular e inusual accidente de tráfico. Dos coches en direcciones opuestas. Uno ocupado por una pareja y una joven. En el otro, dos delincuentes en un intenso forcejeo con un policía local de Paterna. El resultado: un choque que acabó con el agente y uno de los maleantes heridos.
Los hechos se produjeron sobre las cuatro de la tarde, en una gasolinera. Una patrulla de la Policía Local de Paterna procedió a identificar a los dos ocupantes de un Peugeot que se hallaba en la estación de servico, ya que infundieron sospechas a los agentes.
El conductor del vehículo dio un nombre falso que no se correspondía con un DNI que los policías encontraron en el vehículo. Las sospechas de los agentes fueron a más, pero de repente sucedió algo completamente inesperado que interrumpió la inspección: los dos ocupantes se metieron en el interior del vehículo y el que se puso al volante apretó el acelerador con intención de huir.
Uno de los policías se abalanzó en el vehículo en marcha para tratar de de impedir la fuga de los dos hombres. Se vivieron momentos de extrema tensión, ya que el coche empezó a avanzar con el agente en el interior. Debido al forcejeo, el vehículo circuló por la calle Mayor «sin ningún control a lo largo de unos 100 metros», según relataron testigos presenciales.
La huida de los delincuentes acabó en accidente de tráfico. Un Ford Escort en el que viajaba una pareja y una chica joven sufrió el impacto. El choque fue muy aparatoso y los dos vehículos «quedaron bastante destrozados», como indicaron las mismas fuentes.
Víctimas del choque
Los ocupantes del Escort resultaron ilesos. El policía local sufrió un golpe en la cabeza y en la espalda y el delincuente que iba al volante padeció una contusión y un ataque de esquizofrenia paranoide, según el personal médico que asistió a los dos heridos. Este último fue evacuado al Hospital General en calidad de detenido.
El hombre fue identificado como F. P. A., de 38 años de edad. Estaba reclamado desde el 7 de agosto para su ingreso en prisión. La policía comprobó que había protagonizado cuatro fugas anteriores y que tiene un largo historial de antecedentes por enfrentamiento armado, atraco o falsedad documental, entre otros delitos. El hombre que le acompañaba, J. L. T. G., de 36 años, ha sido arrestado en 14 ocasiones por tráfico de drogas, atraco y tenencia ilícita de armas.
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