La Guardia Civil investiga si la víctima, que apareció semidesnuda, sufrió una agresión sexual
LA CASA DE LA VÍCTIMA. Dos guardias civiles pasan junto a la vivienda donde fue asesinada la vecina de Pedralba. /JUAN J. MONZÓ
Una mujer de 55 años de edad, Mari Carmen O. Q., fue encontrada muerta, semidesdenuda y con signos de violencia en la madrugada de ayer en su vivienda de Pedralba. El macabro hallazgo tuvo lugar cuando la Policía Local, alertada por una amiga de la víctima, entró en la casa tras encontrar la puerta del garaje semiabierta.
El cuepo sin vida fue descubierto sobre la una de la madrugada después de que un primo hermano de Mari Carmen autorizara la entrada en el domicilio a dos policías locales.
Un mal presagio hizo temer a los vecinos por la vida de la mujer. La puerta del garaje permaneció semiabierta durante la mañana y la tarde del sábado. Era algo muy extraño. Además, Mari Carmen no contestaba a las llamadas de móvil de sus amigas, por lo que la preocupación era cada vez mayor.
Ante tales indicios infaustos, los dos agentes de la Policía Local de Pedralba entraron en la vivienda por el garaje y fue entonces cuando descubrieron el cadáver.
Los policías se dieron cuenta de que el cuerpo presentaba signos de violencia y lucha, por lo que salieron de la escena del crimen y prohibieron la entrada en la vivienda a los familiares.
La intención no era otra que preservar las huellas y vestigios, los mismos que horas más tarde recogían los agentes del laboratorio de criminalística de la Guardia Civil.
El primo de la víctima y otros dos familiares que le acompañaban recibieron la trágica noticia en la puerta de la casa de Mari Carmen, concretamente en el número 57 de la calle Cervantes. Fueron momentos de gran tensión y tristeza.
Poco después llegaron guardias civiles de Llíria, agentes de la Benemérita de Valencia -expertos en investigación criminal-, el forense, el juez de guardia y el retén fúnebre. La tranquila calle Cervantes se llenó de vehículos policiales.
Durante varias horas, los agentes inspeccionaron de forma minuciosa el cadáver, la casa y el garaje de Mari Carmen en busca de huellas, restos de ADN y otros vestigios criminales. Sobre las seis de la madrugada, el juez de guardia autorizó el levantamiento del cuerpo y su trasladado al Instituto de Medicina Legal de Valencia, donde hoy le practicarán la autopsia.
Últimas horas de vida
A primera hora de la mañana del domingo, la noticia de la muerte de la vecina de Pedralba ya corría como la póvora en el pueblo. Mientras los lugareños comentaban el suceso, los agentes del Grupo de Homicidios de la Guardia Civil de Valencia interrogaban a familiares y vecinos de la víctima para reconstruir sus últimas horas de vida.
Al parecer, Mari Carmen había quedado con una amiga para ir a la playa. Esta mujer fue la persona que telefoneó el sábado varias veces a la víctima, pero no contestó a las llamadas de móvil porque ya estaba muerta.
El forense sitúa la hora del crimen entre la noche del viernes y madrugada del sábado, es decir, unas 24 horas antes del hallazgo del cadáver.
Los investigadores de la Guardia Civil están esperando los resultados de la autopsia para saber si la mujer fue violada. Según ha podido saber LAS PROVINCIAS, Mari Carmen ofreció una fuerte resistencia. Así lo indican las heridas defensivas que presentaba la víctima y los indicios de lucha hallados en la vivienda.
La puerta de la casa no estaba forzada. Esto indica que la mujer dejó pasar a su asesino porque presumiblemente lo conocía. Sin embargo, tampoco se descarta la posibilidad de que fuera atacada por la espalda en la calle y luego obligada a entrar en la casa, aunque esta hipótesis es más complicada. Un grito de la víctima habría alertado a los vecinos del tranquilo pueblo de Pedralba.
Una agresión sexual podría ser el móvil del asesinato de Mari Carmen, una mujer religiosa y soltera a la que no se le conocen enemigos. El robo en su vivienda tampoco se descarta, aunque los familiares no sabían ayer si faltaba algo en la casa.
«No nos han dejado entrar. La Guardia Civil está investigando, y nos ha dicho que es mejor que no sepamos nada, por el momento, de lo que le pasó a Mari Carmen», afirma uno de los nueve primos hermanos de la víctima.
1 comentario:
soy una pedralbina que no reside en el pueblo, pero que me siento indignada y dolida por esta triste noticia, era una buena chica y de buena familia, no hay derecho que pases estas cosas, ahora me gustaria que la Guardia Civil o a quien le corresponda encontrases a estos asesinos y hagan justicia, ya que por desgracia son muchos los casos que aún estan por resolver en este pais. lo siento de corazon
Publicar un comentario