lunes, 20 de abril de 2009

VENEZUELA. Una bala perdida alcanzó en la cabeza a trabajador en Petare

El fin de semana se reportaron 59 homicidios en Caracas

Mejicano lamentó la muerte de su compañero (Fernando Sánchez)

Un trabajador de 26 años, identificado como Denis Calderón, falleció luego de ser alcanzado por un proyectil cuando se encontraba camino a su casa en el barrio Julián Blanco, en Petare.

La víctima, quien laboraba como empleado del Ministerio de la Defensa, fue trasladada al hospital Domingo Luciani, donde falleció. Sus familiares, quienes acudieron a la morgue de Bello Monte para reclamar el cadáver, dijeron que el infortunado hombre dejó a dos hijos huérfanos. El crimen ocurrió en horas de la tarde del pasado domingo.

En la medicatura forense les pidieron a los parientes del trabajador un poco de paciencia porque la sala de autopsias se encontraba abarrotada.

Durante el fin de semana las autoridades contabilizaron 59 homicidios en Caracas, entre ellos un cuádruple crimen en el barrio Carapita de la parroquia Antímano y un triple homicidio en la parroquia 23 de Enero.

A la morgue también acudieron los parientes de Janis José Rosillo Pineda (40) quien fue asesinado a tiros en el barrio La Parrilla, en Petare. El asesinato ocurrió a las 10:30 de la noche del pasado domingo cuando el agraviado se dirigía hacia una bodega de la zona.

El agraviado trabajaba como escolta de seguridad para una empresa privada de bebidas gaseosas. Sus compañeros de labores dijeron que posiblemente los delincuentes intentaron despojarlo de su arma, pero en ese momento se encontraba desprovisto de su pistola. Era casado y dejó a cinco hijos huérfanos, dijo Nelson Mejicano, un compañero de trabajo del infortunado trabajador.

Además, a las 9:30 de la noche del pasado domingo resultó muerto Robert Chacón de 18 años en el bloque 9 de la urbanización Casalta III.

Sus familiares refirieron que el joven quedó atrapado en la línea de fuego cuando dos bandas rivales se enfrentaban a tiros. Un proyectil le impactó por un costado y afectó órganos vitales. Trabajaba en una distribuidora de pollos situada en la avenida San Martín. Fue ingresado sin vida al Hospital Periférico de Catia.

Los delincuentes huyeron de la zona. GR


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