sábado, 28 de marzo de 2009

VENEZUELA.Cuerpos decapitados fueron lanzados desde viaducto


Bomberos de Miranda realizaron rescate en la carretera hacia el oriente del país

Más de media hora tardaron los funcionarios para rescatar los cadáveres (Rony Vargas)

Dos cadáveres decapitados fueron hallados, la mañana de ayer, debajo del primer viaducto de la autopista Gran Mariscal de Ayacucho, tramo Guatire-Caucagua, con sentido Caracas, específicamente en el sector La Guacharaca.

Uno de los cuerpos estaba desmembrado y el otro envuelto en una bolsa plástica negra. Según detallaron efectivos de los bomberos de Miranda, quienes realizaron el rescate, a las víctimas les cortaron las manos y los pies, posiblemente para evitar que fuesen identificadas.

El subteniente de los bomberos José Muñoz, destacó que cinco efectivos de la estación Caucagua descendieron en rappel desde el viaducto para lograr levantar los cuerpos que fueron reportados, la tarde del jueves, por un gandolero que se detuvo en la calzada y los observó desde lejos.

Ninguno de los cadáveres portaba vestimenta u otro distintivo como sábanas o telas, por lo que se hizo imposible su identificación. Resaltó Muñoz que los funcionarios realizaron una revisión exhaustiva de la zona, para tratar de localizar las cabezas de los cuerpos y facilitar su identificación. Sin embargo, sólo se hallaron partes de los cadáveres desmembrados, como brazos y piernas.

Efectivos del Cicpc local informaron que, presuntamente, los cuerpos fueron lanzados desde el viaducto envueltos en bolsas plásticas y cayeron en la zona boscosa cercana a las riberas del Río Grande. Ambos estaban en avanzado estado de descom- posición.

Refirieron, además, que el decapitado es un hombre de aproximadamente 1,70 metros de estatura. Sobre el cadáver desmembrado, los uniformados indicaron que podría tratarse de una mujer, pero no lo aseguraron del todo, pues el tronco, brazos y piernas encontradas estaban putrefactos.

Con este hallazgo, suman cuatro las víctimas mortales localizadas en esa zona en menos de 15 días. En los casos anteriores, los cuerpos fueron atacados a tiros. Residentes admiten que la localidad es muy peligrosa.




Deivis Ramírez Miranda
EL UNIVERSAL

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