sábado, 14 de febrero de 2009

VENEZUELA. Por un rancho de zinc mató a su suegra y la lanzó a la basura


La sexagenaria fue envuelta en bolsas y ocultada dentro de un pipote

El cadáver localizado la tarde del pasado miércoles en un basurero de la parte alta del barrio Carapita corresponde a una sexagenaria que había sido denunciada como desaparecida por sus familiares desde el pasado 15 de enero.

Se trata de Viviana Griselda Colina de Arreaza, de 62 años de edad. Sus parientes acudieron a la División contra Homicidios para denunciar que la agraviada había discutido con la pareja de su hija y le pidió que desalojara la vivienda y desde ese momento la señora desapareció. "Nosotros creemos que él la mató para quedarse con ese rancho y mi tía no dice nada porque es una persona que tiene problemas mentales", dijo Maria de Arreaza, nieta de la mujer asesinada.

El cadáver fue localizado por los vecinos en un vertedero de basura situado cerca de la casa. Los detectives de la División contra Homicidios arrestaron al sospechso para someterlo a interrogatorios.

El cuerpo fue hallado envuelto en bolsas plásticas y oculto dentro de un pipote. "Me dijeron que de noche escuchaban a mi tía llamando a mi abuela, pero en el barrio nadie le hace caso por los problemas mentales que presenta. Hace unos días yo le toqué la puerta y él se puso nervioso, no me supo dar razón de nada", dijo la joven María Arreaza quien reside en Güigüe, estado Carabobo.

Los parientes de la señora asesinada manifestaron que el imputado acostumbraba consumir bebidas alcohólicas y luego asumía posturas violentas.

La víctima no estaba de acuerdo con la relación que su hija mantenía, debido a su condición de discapacitada.

El cadáver no presentó señales de violencia aparentes. Sin embargo, los investigadores no descartan que la mujer haya sido estrangulada. En medios policiales trascendió que el yerno de la sexagenaria habría confesado su crimen, pero la versión no fue confirmada. Tienen previsto realizar una inspección en la vivienda para buscar evidencias físicas.


Gustavo Rodríguez
EL UNIVERSAL

No hay comentarios: