Los seis arrestados seleccionaban el establecimiento donde "colocar" los billetes falsos, principalmente peluquerías y mercerías pequeñas donde no existieran dispositivos para verificar su autenticidad
La familia de los falsificadores
EFE / Madrid
La Policía Nacional ha detenido a seis personas, todas ellas de una misma familia y radicada en Valencia, especializadas en la falsificación de billetes de 50 euros que distribuían por toda España, negocio que les había reportado unos beneficios cercanos al medio millón de euros en los últimos años.
Los investigadores llevaban tiempo tras los pasos de esta banda ya que en dos años, la Policía ya había intervenido casi 10.000 billetes elaborados por los ahora detenidos, principalmente en la Comunidad Valenciana, Madrid y Barcelona.
En la operación se ha logrado desmantelar el centro de producción, situado en el domicilio del cabeza de familia en Valencia, donde se han intervenido 1.400 billetes falsos junto a numeroso material técnico para confeccionarlos.
La banda operaba al menos desde 2002 y ya antes se había dedicado a la falsificación de billetes de 5.000 pesetas, por lo que contaba con gran experiencia a la hora de realizar copias de gran calidad, que incluso envejecían para que pasaran inadvertidas.
Una vez terminada una partida de billetes, cada uno de los componentes del grupo realizaba compras de escaso valor en establecimientos de toda la geografía española que escogían cuidadosamente para no levantar sospechas.
La banda se desplazaba prácticamente todas las semanas y, una vez elegido el lugar, se instalaba durante varios días en un hotel, que le servía de centro de operaciones.
Después seleccionaban el establecimiento donde "colocar" los billetes falsos, principalmente peluquerías y mercerías pequeñas donde no existieran dispositivos para verificar su autenticidad.
Su distribución alcanza a todo el territorio nacional, con una especial incidencia en la Comunidad Valenciana, donde se han intervenido un total de 1.470 billetes en Valencia y 797 en Alicante, seguida de las provincias de Barcelona y Madrid, donde se han intervenido 708 y 497 unidades, respectivamente.
Las falsificaciones eran realizadas mediante una impresora digital tipo "ink-jet" y un ordenador con el que trataban las imágenes.
En los tres registros practicados en Valencia, se han decomisado dos discos duros con información para elaborar las copias, una memoria extraíble con imágenes escaneadas del billete falsificado, una impresora, parches holográficos y otro material destinado a la elaboración de las falsificaciones. Con el material incautado en esta operación el grupo desarticulado estaba en disposición de elaborar otros 3.000 billetes falsos.
La operación ha sido realizada por la Brigada de Investigación del Banco de España de la Comisaría General de Policía Judicial, en colaboración con el Grupo de Delincuencia Económica de la Jefatura Superior de Policía de Valencia y la Brigada Provincial de Policía Judicial de Segovia.
Los investigadores llevaban tiempo tras los pasos de esta banda ya que en dos años, la Policía ya había intervenido casi 10.000 billetes elaborados por los ahora detenidos, principalmente en la Comunidad Valenciana, Madrid y Barcelona.
En la operación se ha logrado desmantelar el centro de producción, situado en el domicilio del cabeza de familia en Valencia, donde se han intervenido 1.400 billetes falsos junto a numeroso material técnico para confeccionarlos.
La banda operaba al menos desde 2002 y ya antes se había dedicado a la falsificación de billetes de 5.000 pesetas, por lo que contaba con gran experiencia a la hora de realizar copias de gran calidad, que incluso envejecían para que pasaran inadvertidas.
Una vez terminada una partida de billetes, cada uno de los componentes del grupo realizaba compras de escaso valor en establecimientos de toda la geografía española que escogían cuidadosamente para no levantar sospechas.
La banda se desplazaba prácticamente todas las semanas y, una vez elegido el lugar, se instalaba durante varios días en un hotel, que le servía de centro de operaciones.
Después seleccionaban el establecimiento donde "colocar" los billetes falsos, principalmente peluquerías y mercerías pequeñas donde no existieran dispositivos para verificar su autenticidad.
Su distribución alcanza a todo el territorio nacional, con una especial incidencia en la Comunidad Valenciana, donde se han intervenido un total de 1.470 billetes en Valencia y 797 en Alicante, seguida de las provincias de Barcelona y Madrid, donde se han intervenido 708 y 497 unidades, respectivamente.
Las falsificaciones eran realizadas mediante una impresora digital tipo "ink-jet" y un ordenador con el que trataban las imágenes.
En los tres registros practicados en Valencia, se han decomisado dos discos duros con información para elaborar las copias, una memoria extraíble con imágenes escaneadas del billete falsificado, una impresora, parches holográficos y otro material destinado a la elaboración de las falsificaciones. Con el material incautado en esta operación el grupo desarticulado estaba en disposición de elaborar otros 3.000 billetes falsos.
La operación ha sido realizada por la Brigada de Investigación del Banco de España de la Comisaría General de Policía Judicial, en colaboración con el Grupo de Delincuencia Económica de la Jefatura Superior de Policía de Valencia y la Brigada Provincial de Policía Judicial de Segovia.
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