
No les importaba el peso ni el tamaño. Grúas, retroexcavadoras y camiones, además de furgonetas, turismos y todoterrenos eran sus objetivos. La Guardia Civil ha desmantelado una banda dedicada a la sustracción de maquinaria de gran tonelaje en España. Los investigadores atribuyen a este grupo delictivo 31 robos en Castilla-La Mancha, Madrid y Castilla y León.
Los delincuentes utilizaban los puertos de Valencia y Castellón para enviar a Marruecos los vehículos sustraídos. La operación, denominada Sable, se inició el mes de abril y se ha saldado con la detención de seis personas -un español, tres marroquíes y dos polacos- y la incautación de cinco grúas de gran tonelaje, seis retroexcavadoras, una autocaravana, una embarcación de recreo con remolque y cuatro manipuladoras telescópicas, entre otras máquinas.
En el puerto de Castellón, la Guardia Civil localizó en abril un camión-grúa que había sido robado en Madrid y que iba a ser enviado a Marruecos a través de Siria. Las investigaciones posteriores detectaron un incremento de los robos de este tipo de máquinas en Madrid, Castilla-La Mancha y Castilla y León, y dieron con los presuntos autores de estos delitos.
La Guardia Civil comprobó que el material robado era enviado a una nave alquilada de Ontígola (Toledo), donde se falsificaban las matrículas, se alteraban los números de bastidor y se cambiaba el color. Posteriormente, la maquinaria era embarcada en los puertos de Valencia y Castellón con destino a Marruecos, donde se vendía con documentación falsa.
La banda aprovechaba los fines de semana o el fin de la jornada laboral para actuar en obras con escasa vigilancia. El grupo estaba perfectamente estructurado y cada individuo realizaba una tarea delictiva. Los tres marroquíes se encargaban de la infraestructura para exportar los vehículos, mientras que los dos polacos falsificaban los documentos y el español sustraía la maquinaria pesada.
Los delincuentes utilizaban los puertos de Valencia y Castellón para enviar a Marruecos los vehículos sustraídos. La operación, denominada Sable, se inició el mes de abril y se ha saldado con la detención de seis personas -un español, tres marroquíes y dos polacos- y la incautación de cinco grúas de gran tonelaje, seis retroexcavadoras, una autocaravana, una embarcación de recreo con remolque y cuatro manipuladoras telescópicas, entre otras máquinas.
En el puerto de Castellón, la Guardia Civil localizó en abril un camión-grúa que había sido robado en Madrid y que iba a ser enviado a Marruecos a través de Siria. Las investigaciones posteriores detectaron un incremento de los robos de este tipo de máquinas en Madrid, Castilla-La Mancha y Castilla y León, y dieron con los presuntos autores de estos delitos.
La Guardia Civil comprobó que el material robado era enviado a una nave alquilada de Ontígola (Toledo), donde se falsificaban las matrículas, se alteraban los números de bastidor y se cambiaba el color. Posteriormente, la maquinaria era embarcada en los puertos de Valencia y Castellón con destino a Marruecos, donde se vendía con documentación falsa.
La banda aprovechaba los fines de semana o el fin de la jornada laboral para actuar en obras con escasa vigilancia. El grupo estaba perfectamente estructurado y cada individuo realizaba una tarea delictiva. Los tres marroquíes se encargaban de la infraestructura para exportar los vehículos, mientras que los dos polacos falsificaban los documentos y el español sustraía la maquinaria pesada.
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