Los delincuentes lo despojaron de sus pertenencias y su teléfono celular
Un joven de 21 años de edad fue asesinado por un grupo de antisociales en horas de la madrugada del domingo cuando transitaba por una calle adyacente al centro comercial Galerías Ávila, situado en la parroquia Cande- laria.
La víctima, identificada como Ludmer Alberto Galindo, fue atacada a tiros tras ser interceptada por delincuentes que se desplazaban en un vehículo Mazda, informaron sus familiares. El infortunado joven salía de una fiesta acompañado de otros amigos y de su novia, dijo la señora Imelda González, madre del occiso.
Señaló la desconsolada mujer que los delincuentes lo despojaron de sus prendas, de su cartera y de su celular. El agraviado estudiaba en la Escuela Internacional del Deporte en Cuba, pero el pasado mes de agosto decidió retirarse y regresar al país para estudiar otra carrera afín.
"Le pido a este gobierno que controle al hampa. No es posible que los delincuentes estén mejor armados que los policías. Aquí no hay justicia. Mire, señor Presidente, deje de estar pendiente de los problemas de otros países y preocúpese de los venezolanos", señaló la señora González.
Recordó que la pasada semana su esposo fue asaltado cuando se encontraba en una tienda. "Candelaria era una zona tranquila, pero ahora la delincuencia está desbordada. Nadie se siente tranquilo ni dentro de su casa", dijo. GR
La víctima, identificada como Ludmer Alberto Galindo, fue atacada a tiros tras ser interceptada por delincuentes que se desplazaban en un vehículo Mazda, informaron sus familiares. El infortunado joven salía de una fiesta acompañado de otros amigos y de su novia, dijo la señora Imelda González, madre del occiso.
Señaló la desconsolada mujer que los delincuentes lo despojaron de sus prendas, de su cartera y de su celular. El agraviado estudiaba en la Escuela Internacional del Deporte en Cuba, pero el pasado mes de agosto decidió retirarse y regresar al país para estudiar otra carrera afín.
"Le pido a este gobierno que controle al hampa. No es posible que los delincuentes estén mejor armados que los policías. Aquí no hay justicia. Mire, señor Presidente, deje de estar pendiente de los problemas de otros países y preocúpese de los venezolanos", señaló la señora González.
Recordó que la pasada semana su esposo fue asaltado cuando se encontraba en una tienda. "Candelaria era una zona tranquila, pero ahora la delincuencia está desbordada. Nadie se siente tranquilo ni dentro de su casa", dijo. GR
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