Siete muertes violentas en la capital inician la cifra de la semana de Navidad
La familia de un joven de 29 años asesinado en Hoyo de la puerta llegó en un grupo numeroso a retirar el cuerpo (Eduardo Fuentes)
Este lunes era el primer día de las vacaciones de Julia Tejada, de 40 años. Ella había salido de su casa y cerca del mediodía estaba en la Cota Mil, a la altura de la salida de Maripérez en compañía de un amigo, cuando frente al carro en el que viajaban, unos sujetos se disponían a robar. La familia de Tejada no sabe con precisión qué ocurrió, pero frente a ellos se inició un tiroteo y una de las balas alcanzó a Tejada en el intercostal.
Julia fue trasladada al Hospital de Clínicas Caracas, pero falleció cuando la intervenían.
"Yo lo que tengo es mucha rabia, impotencia, indignación, quisiera que hubiera justicia, pero quién sabe", Sergio Sosa, no entiende con precisión las condiciones en que murió su esposa, pero no acaba de aceptar lo ocurrido.
Sosa explica que ellos viven en Montalbán y tienen un niño de 6 años. Julia era administradora, trabajó 20 años de su vida en el Banco Central de Venezuela, 17 de ellos en el área de Análisis Financiero, y los últimos tres en el área de Cultura.
Funcionarios de la Subdelegación de Simón Rodríguez del Cicpc investigan el caso, y entrevistarán a la persona que estaba con Julia para precisar las características de quienes dispararon.
La muerte de Julia es uno de los siete decesos por causas violentas ocurridas en la capital entre las 6:00 a.m. y la misma hora de este martes. Con estas muertes inicia la semana de Navidad.
Tras el volante Jairo Franco, de 30 años, salió la mañana del lunes con su taxi, un Chevrolet Optra gris, para hacer un servicio a unos ejecutivos del Banco de Venezuela que iban a hacer un donativo en el colegio Fe y Alegría del barrio Bolívar, en Petare.
Eran cerca de las cinco de la tarde y Jairo estaba dentro del portón del colegio. Pero decidió salir a la calle a fumar. Luego entró a su carro y fue entonces cuando escucharon los tres tiros. Franco falleció en el lugar.
Las personas que estaban en el colegio, tras los tiros, escucharon el ruido de una moto alejándose calle abajo, rumbo al sector de Píritu. Algunos testigos dicen que se trataba de un motorizado que iba con parrillero.
La familia de Franco explica que él tenía 9 meses trabajando en una línea que solo hacía transportes a ejecutivos. Creen que los asesinos lo vieron bien vestido y deben haber querido asaltarlo y quizás el se resistió al robo y por eso lo mataron.
Franco vivía en Baruta con su familia, y deja un hijo. Otra muerte violenta de este lunes fue la de Marco Antonio Delgado, de 28 años, quien a las 8:30 p.m. del domingo iba de parrillero con su primo José Gregorio Delgado, de 22 años, cuando en la Gran Parada, en Las Adjuntas, chocó con otra moto. Marco ingresó al Pérez Carreño, pero murió la mañana del lunes, su primo aún está hospitalizado.
En los primero 21 días de este año, más de 370 cuerpos han ingresado a la morgue de Bello Monte, más de 300 de ellos por muertes violentas.
Entre esas muertes está la de José Noel Ramírez, de 57 años, quien fue encontrado degollado en su casa en Capuchinos. Su prima, Carmen Márquez, explica que la casa estaba en desorden y habían robado.
Gerald Lester Istúriz, de 19 años, falleció en Hoyo de la Puerta, cerca de la casa de su madre, a consecuencia de varios tiros. Más de 12 personas de su familia fueron a la morgue a retirar el cuerpo.
Laura Dávila Truelo
EL UNIVERSAL
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