En USA y en breve la Policía Metropolitana los patrulleros estan monitoreados al punto que, si sacan la escopeta del anclaje especialemnte diseñado para escopetas repetidoras, automaticamente salta una alarma en la central que anuncia problemas graves.
Veamos que paso aca.
Los policías fueron sorprendidos por dos delincuentes, que tras reducirlos e inmovilizarlos escaparon con las armas reglamentarias de los efectivos
Dos efectivos de la Policía fueron asaltados, secuestrados en su propio patrullero y abandonados esposados, por dos delincuentes que los sorprendieron en la localidad bonaerense de Vicente Casares.
Según trascendió hoy, el episodio se produjo ayer al mediodía, en las calles de esa localidad rural de la zona norte de la provincia de Buenos Aires, y los dos delincuentes escaparon luego de dejar esposados y dentro del patrullero a los efectivos.
Los asaltantes, de acuerdo con lo consignado, huyeron con las armas reglamentarias de los efectivos y una escopeta calibre 12.70 que encontraron dentro del patrullero. Hasta el momento, a pesar de los operativos dispuestos por la fuerza de seguridad provincial, los sujetos no habían podido ser localizados, según se informó.
Las víctimas del curioso episodio fueron un subteniente y un oficial de la Policía Bonaerense, quienes ayer, cerca de las 12 del mediodía, se encontraban patrullando las calles de Vicente Casares, de acuerdo con lo señalado hoy por un matutino porteño.
En un momento determinado, los policías divisaron a dos personas en actitud "sospechosa" y decidieron acercarse, según contaron posteriormente los propios policías al hacer la denuncia del hecho.
Cuando intentaron identificar a los dos sujetos, éstos se resistieron, los amenazaron con las armas que tenían en su poder y lograron reducirlos, se indicó.
Enseguida, de acuerdo con lo informado, tomaron las esposas que llevan los policías y los inmovilizaron. Con el control de la situación, los dos ladrones llevaron a los efectivos hasta las afueras de la localidad, perteneciente al partido de Cañuelas, y los dejaron abandonados, a la vera del río Matanza.
Antes de escapar, los delincuentes se apoderaron de las armas reglamentarias de los policías y de la escopeta que hallaron dentro del patrullero. Con ese botín, emprendieron la fuga a pie, dejando a los dos efectivos esposados y dentro del móvil policial.
Según se señaló, los dos policías finalmente fueron socorridos por compañeros de la fuerza, y más tarde hicieron la correspondiente denuncia, dando cuenta del robo del armamento
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