El Cicpc tardó siete horas en llegar al sitio y recoger el cuerpo del hombre
Alexandra Piñera pidió presencia policial (Fernando Sánchez)
"¡Quieto ahí, quieto ahí!", le ordenaron los maleantes. "Ahora te subes la camisa", le insistieron. Miller Cova, de 28 año, no tuvo más remedio que obedecer cada una de las órdenes.
Cuando terminó de cumplir el último de los requerimientos, los asesinos comenzaron a descargar sus cacerinas. Contorsionándose cada vez que recibía un impacto, se desvaneció. Ya en el piso, tirado boca abajo y adolorido, recibió el último tiro en la cabeza. Luego lo robaron.
Miller vivía en Carapita, específicamente en el barrio Bicentenario. Y allí, a una cuadra y media de su casa, el viernes a las 7:05 de la mañana, mientras esperaba la buseta que lo bajaría hasta el metro, fue asesinado.
Miller trabajaba como vendedor de zapatos en el Metromercado de Capitolio desde hacía dos años. El recorrido que hizo el viernes lo hacía siempre desde que entró a ese negocio. Sólo que más temprano. Solía salir a las 6 de la mañana. Pero el viernes lo hizo una hora más tarde.
El Cicpc recogió el cuerpo siete horas después. Los funcionarios le argumentaron a la familia que no había unidades.
La inseguridad en la zona es tan fuerte que Muller y su esposa Alexandra Piñera planificaban mudarse en abril para Los Teques, donde ya tenían una casa. "Queríamos que nuestros tres hijos tuvieran una mejor calidad de vida y dejaran ya de ver tanto muerto". mii
Cuando terminó de cumplir el último de los requerimientos, los asesinos comenzaron a descargar sus cacerinas. Contorsionándose cada vez que recibía un impacto, se desvaneció. Ya en el piso, tirado boca abajo y adolorido, recibió el último tiro en la cabeza. Luego lo robaron.
Miller vivía en Carapita, específicamente en el barrio Bicentenario. Y allí, a una cuadra y media de su casa, el viernes a las 7:05 de la mañana, mientras esperaba la buseta que lo bajaría hasta el metro, fue asesinado.
Miller trabajaba como vendedor de zapatos en el Metromercado de Capitolio desde hacía dos años. El recorrido que hizo el viernes lo hacía siempre desde que entró a ese negocio. Sólo que más temprano. Solía salir a las 6 de la mañana. Pero el viernes lo hizo una hora más tarde.
El Cicpc recogió el cuerpo siete horas después. Los funcionarios le argumentaron a la familia que no había unidades.
La inseguridad en la zona es tan fuerte que Muller y su esposa Alexandra Piñera planificaban mudarse en abril para Los Teques, donde ya tenían una casa. "Queríamos que nuestros tres hijos tuvieran una mejor calidad de vida y dejaran ya de ver tanto muerto". mii
No hay comentarios:
Publicar un comentario