jueves, 30 de octubre de 2008

Un bombero salva a una mujer que recibía cuchilladas de un perturbado en Valencia


  • Miguel Ángel Padilla, experto en artes marciales, redujo al maniaco.
  • Los bomberos derribaron la puerta con un macetero para rescatarla.
  • Eran las 11.33 horas de la mañana de ayer cuando los bomberos recibieron el aviso de que un hombre estaba amenazando de muerte a una mujer con un cuchillo en la plaza Pedagoga Raquel Payá de Valencia.

    La mujer intentó convencer al perturbado de que no se arrojara al vacío
    Minutos antes, el agresor, que al parecer se encontraba en un estado de ansiedad, había amenazado con arrojarse al vacío desde un quinto piso. La vecina de abajo intentó convencerle a viva voz para que no lo hiciera. Éste se lo tomó a mal y se deslizó por la fachada de la finca hasta colarse por el balcón de su vecina.

    Varias cuchilladas

    Se abalanzó sobre ella y le propinó varias cuchilladas. Ante esta situación de grave riesgo, los bomberos de Valencia, ya en el lugar del suceso, pasaron a la acción.

    Miguel Angel Padilla subió por las escaleras del inmueble, junto a otros compañeros, y, al llegar a la puerta, la derribaron con un gran macetero que había en el rellano. Al entrar, se encontraron con el perturbado, muy nervioso, y con el cuchillo en la mano.

    "La mujer estaba sangrando, ya que tenía un corte en la cara y varios en los brazos", explicó Padilla a 20minutos.es.

    Por ello, no se lo pensó. "En 30 segundos ya lo había reducido aplicando mis conocimientos en artes marciales", relató el bombero.

    El momento de estar cara a cara ante el maniaco era muy peligroso, "ya que no sabíamos como podía reaccionar y la mujer corría riesgo".

    Llevaba un cuchillo en la mano y su intención era agredir a la mujer

    "Si cometemos un error hay personas inocentes que pueden salir gravemente perjudicadas, y más en este caso que llevaba un cuchillo en la mano y su intención era agredir a la mujer, si no lo hubiéramos aplacado", apuntó Miguel Ángel Padilla.

    Este bombero, acostumbrado a apagar fuegos, se ha convertido en héroe por otro motivo: salvar a una mujer secuestrada por un perturbado que le había propinado varias cuchilladas.

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