Los agentes de la Brigada de la Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía han descartado, tras doce horas de pesquisas, la participación de una tercera persona en el suceso y concluido que se trata con toda probabilidad de un nuevo caso de violencia machista en una pareja en la que la esposa había denunciado al marido por maltrato, según fuentes de la investigación.
El padre del ex agente, Antonio H., ha manifestado a los periodistas que un Juzgado de El Ejido, localidad almeriense donde residía la pareja, había decretado una orden de alejamiento contra su hijo tras la denuncia de su nuera y que se separaron temporalmente, pero volvieron a vivir juntos porque "últimamente se llevaban bien". Antonio mantiene la convicción de que su hijo no ha sido capaz de "algo así" ya que, al igual que su nuera, eran personas "maravillosas" que mantenían "la relación de un matrimonio normal".
Ella fue atada
Fue Antonio quien, al acudir junto a su mujer al cortijo, encontró la luz encendida y el coche de la pareja en la puerta, por lo que temió que "algo malo había sucedido" y se topó con una imagen "muy desagradable", ya que ambos murieron desangrados.
Según han informado fuentes de la investigación, que desarrollan agentes de la Brigada de la Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía, ambos cuerpos han sido hallados con distintos cortes y además el de la mujer -Rosario G.R.- con signos de haber sido atada.
El guardia civil fallecido -Manuel H.M.- se encontraba de baja por tratamiento psicológico y contaba con una denuncia previa por malos tratos en Almería.
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