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En un monoambiente de una de la víctimas del triple crimen que los investigadores apuntan que se trató de un hecho mafioso con una posible participación de narcotraficantes mexicanos o colombianos, secuestraron seis autos y dos motos que no están a nombre de Forza, pero eran de su uso cotidiano.
Durante el allanamiento concretado anoche en Pilar, se encontraron un BMW, un Audi, dos Chevrolet Vectra, una
camioneta Ford Ranger, un Citroen C3 y dos motos, una marca BMW y otra Yamaha, según precisaron los voceros.El allanamiento, ordenado por la fiscal porteña Ana Yacobucci, se realizó en el complejo Concord, ubicado a la altura del kilómetro 49,500 del Ramal Pilar de la autopista Panamericana.
Allí Forza tenía su oficina y que para los investigadores es clave no sólo para buscar documentación y datos sobre su actividad ligada a la venta de medicamentos, sino porque por ese lugar pasó la mañana del día que desapareció a buscar uno de sus autos, el Peugeot 206 que luego apareció abandonado en Constitución.
El allanamiento se realizó vía exhorto por detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro, peritos en rastros de la Policía Científica bonaerense y personal de Gendarmería Nacional.
Del procedimiento no participó la Policía Federal, algo que extrañó a los jefes policiales de esa fuerza que se enteraron del allanamiento por la prensa.
Los detectives de la DDI de San Isidro, que trabajaron los primeros días de la búsqueda de los tres amigos, cuando aún no habían aparecido asesinados, le aportaron a la fiscal Yacobucci el dato de que un testigo del Concord afirmó que Forza se movilizaba en varios autos que tenía en las cocheras del complejo.
El elemento más relevante secuestrado en la oficina fue una notebook que ahora será analizada por los
El allanamiento se realizó vía exhorto por detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro, peritos en rastros de la Policía Científica bonaerense y personal de Gendarmería Nacional.
Del procedimiento no participó la Policía Federal, algo que extrañó a los jefes policiales de esa fuerza que se enteraron del allanamiento por la prensa.
Los detectives de la DDI de San Isidro, que trabajaron los primeros días de la búsqueda de los tres amigos, cuando aún no habían aparecido asesinados, le aportaron a la fiscal Yacobucci el dato de que un testigo del Concord afirmó que Forza se movilizaba en varios autos que tenía en las cocheras del complejo.
El elemento más relevante secuestrado en la oficina fue una notebook que ahora será analizada por los
expertos en informática en búsqueda de información sobre los negocios y vínculos del joven empresario.
Además, los expertos de la Policía Científica de San Isidro levantaron una serie de huellas dactilares que serán analizadas en el laboratorio para determinar si a partir de ellas se puede identificar a algún sospechoso.
El caso comenzó a ser investigado el jueves 7 de agosto cuando se denunció en la Capital Federal la desaparición de Forza (34), Damián Ferrón (37) y Leopoldo Bina (35), quienes se conocían por motivos comerciales y ese día tenían previsto reunirse.
Seis días después, los tres fueron encontrados ejecutados de 16 balazos en un zanjón al costado de una ruta de la localidad bonaerense de General Rodríguez.
Los investigadores siguen las pistas de un móvil vinculado al robo y adulteración de medicamentos y la posible participación de narcotraficantes.
Además, los expertos de la Policía Científica de San Isidro levantaron una serie de huellas dactilares que serán analizadas en el laboratorio para determinar si a partir de ellas se puede identificar a algún sospechoso.
El caso comenzó a ser investigado el jueves 7 de agosto cuando se denunció en la Capital Federal la desaparición de Forza (34), Damián Ferrón (37) y Leopoldo Bina (35), quienes se conocían por motivos comerciales y ese día tenían previsto reunirse.
Seis días después, los tres fueron encontrados ejecutados de 16 balazos en un zanjón al costado de una ruta de la localidad bonaerense de General Rodríguez.
Los investigadores siguen las pistas de un móvil vinculado al robo y adulteración de medicamentos y la posible participación de narcotraficantes.
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