La Policía Nacional detiene en Valencia a tres miembros de la banda tras confiscar dos alijos con destino a Xirivella y Chiva
J. A. MARRAHÍ | VALENCIA
Un policía nacional muestra parte de la droga intervenida. / CNP
Cocaína de gran pureza procedente de Costa Rica entraba masivamente en España. Una red con ramificaciones en la Comunitat Valenciana traía cada mes 40 kilos que eran distribuidos por toda España a través de envíos postales y correos humanos. La Policía Nacional ha arrestado a nueve miembros de esta organización de narcotraficantes, tres de ellos en Valencia.
La investigación dio comienzo el pasado mes de julio. Las primeras sospechas recayeron sobre un grupo de personas asentadas en Vigo (Pontevedra). Desde el municipio gallego, «coordinaban el envío y recepción de partidas de cocaína procedente de Suramérica», destacaron fuentes policiales.
Los 'narcos' usaban buzones postales vacíos controlados por medio de identidades falsas que, en ocasiones, sacaban de recibos de la luz sustraídos en los patios de las casas. Los envíos de droga eran recogidos con justificantes fraudulentos.
En agosto, la Policía Nacional detectó dos partidas de estupefaciente. Contenían 600 gramos de coca con destino a Granada y a la localidad valenciana de Xirivella. En esta primera fase de la operación fueron detenidas dos personas.
Las pesquisas prosiguieron y los agentes averiguaron el destino de otro de los envíos: Chiva, de nuevo en Valencia. En esta ocasión, la coca iba oculta en el marco de madera de un escudo. Los agentes se incautaron de 530 gramos y la destinataria fue detenida.
Gracias a estos arrestos, la policía supo que la banda había mandado a Colombia un correo humano: una mujer que debía transportar un ordenador portátil en una mochila. En su interior llevaba camuflados más de cinco kilos y medio de cocaína. El dispositivo policial culminó en el aeropuerto de Barajas, con la detención de la sospechosa.
La operación se ha saldado con el arresto de nueve personas: cuatro en Madrid, tres en Valencia y dos en Granada. Los agentes han practicado tres registros domiciliarios, dos de ellos en Valencia y el tercero en la localidad madrileña de Villanueva del Pardillo. Los cabecillas de la banda estaban asentados en la capital y «eran auxiliados por sus lugartenientes, que desde localidades próximas a Valencia se encargaban de la distribución y venta del estupefaciente», agregó la policía.
En otra intervención contra el narcotráfico la Guardia Civil detuvo el viernes a un joven británico de 27 años en el aeropuerto de El Altet (Elche). Pretendía introducir en España 27 kilos de hachís ocultos en su equipaje. Los hechos sucedieron sobre las 20.30 horas, cuando los agentes detectaron dos maletas que, por sus características, les infundieron sospechas. Tras registrarlas encontraron varios paquetes dispuestos en tacos rectangulares y envueltos en papel oscuro. Al abrirlos descubrieron el estupefaciente.
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